Noventa minutos. Tal vez 120. Podrían ser unos penales en el colmo de la tensión extrema. Pero luego de 33 meses de eliminatorias en el mundo, este miércoles 15 de noviembre no más que eso faltará para saber si Perú o Nueva Zelanda va a ser el último clasificado a la Copa Mundial Rusia 2018.
La expectativa en Lima es máxima. Han sido muchos años de frustraciones -35 desde aquel lejano España 1982- que pueden exorcizarse en una sola noche. Los neozelandeses quieren que la tercera repesca de su historia sea el pasaporte hacia su tercera Copa del Mundo.
Todo apunta a que Ricardo Gareca va a confiar en los mismos 11 que empataron en Nueva Zelanda y extendieron a siete la racha de partidos sin perder que tiene el equipo en eliminatorias. Luis Advíncula, Raúl Ruidíaz y Yordy Reyna deberán esperar su chance en el banco. Necesita ganar para clasificarse y, en estos clasificatorios, tiene un récord de 4 victorias, 3 empates y 2 derrotas con 15 goles a favor y 14 en contra.
“El 0-0 fue un buen resultado”, aseguró el mediocampista Bill Tuiloma. No perder ni recibir goles dejó conformes a los All Whites, que son mundialistas con un empate con goles. Confían en la mayor experiencia actual de sus jugadores –dispersos en Ligas competitivas como la inglesa, la holandesa o la estadounidense- con respecto al equipo que perdió con México para Brasil 2014.
Regresará Chris Wood, el delantero estrella –suma 24 goles en 55 partidos, tras su ausencia del once inicial en Wellington por una dolencia muscular.
Jugador a seguir: Christian Cueva (Perú). El enganche peruano, de 25 años, es una de las grandes cartas ofensivas del equipo de Gareca: en el transcurso de los clasificatorios marcó 4 goles y dio 3 asistencias. Ante un esquema presumiblemente defensivo del rival, su inteligencia para encontrar huecos entre un mar de piernas será fundamental para la suerte de unos o de otros.
