Al menos diez personas murieron este lunes en los devastadores incendios en el norte de California, que ya han devorado casi 29 mil hectáreas y provocaron la evacuación de, al menos, 20 mil personas de sus casas.
Hasta mil 500 edificios fueron destruidos y más de 103 mil personas se encuentran sin gas ni electricidad, especialmente en los condados de Napa y Sonoma, dos de las zonas más dañadas.
Los bomberos luchan contra las llamas en ocho condados: Napa, Sonoma, Lake, Mendocino, Yuba, Nevada, Calaveras y Butte.
Fue en el condado de Napa donde, durante la madrugada, se registraron tres grandes incendios y varios de menor envergadura, indicó Molly Rattigan, portavoz del condado.
Esos incendios se han ido extendiendo a lo largo de las horas, provocando nuevos focos, y llevaron al gobernador del estado, Jerry Brown, a declarar el estado de emergencia en algunos condados del norte de California, donde se encuentran gran cantidad de los viñedos que hacen famoso el vino del estado.
Esto es realmente serio, se está moviendo muy rápido. El calor, la falta de humedad y los vientos nos están llevando a una situación muy peligrosa y lo están empeorando”, dijo Brown durante una rueda de prensa.