El ex presidente estadounidense George W Bush pidió hoy al Gobierno de Donald Trump que abogue por la democracia en el mundo, que resista la tentación de aislarse del resto de las naciones y denunció “intolerancia” en el actual “clima político” local.
Vemos el regreso de sentimientos de aislacionismo, olvidando que la seguridad de Estados Unidos está directamente amenazada por el caos y la miseria de lugares lejanos, donde tienden a surgir amenazas como el terrorismo, enfermedades infecciosas, bandas criminales y el narcotráfico, sostuvo Bush.
Si bien no mencionó a Trump, las declaraciones del ex presidente fueron vistas como una abierta crítica a la política de “América primero” del jefe de Estado. El ex presidente dijo que nota un “regreso a los sentimientos de aislacionismo” en las amenazas de Washington por salirse de acuerdos internacionales, como el nuclear con Irán.
De todas formas, luego del discurso, Bush le dijo al diario “The New York Times” que esperaba que sus palabras fueran escuchadas en la Casa Blanca.
Para el ex presidente, en el actual clima político “se incentiva la intolerancia”. “Nuestra política parece ser más vulnerable a las teorías conspirativas”, dijo en referencia a una serie de mitines de supremacistas blancos, que le valieron además críticas a Trump por no haber reaccionado con la suficiente dureza.
Las personas de cualquier raza, religión y etnia pueden ser totalmente iguales en Estados Unidos. Esto significa que la intolerancia o la supremacía blanca, en cualquiera de sus formas, es una blasfemia en contra de nuestras creencias, afirmó Bush.